Después de la impostada “Dallas Buyer’s Club”, vuelve la polémica, en este caso de la mano de Ryan Murphy (Glee, American Horror Story), que ofrece un retrato bastante parcial (los miembros del Gay Men’s Health Crisis parecen más una célula del Mossad) de los primeros años del sida en Nueva York, en esta adaptación de la obra de teatro autobiográfica de Larry Kramer. Nunca se ha visto tanto sarcoma de Kaposi en una pantalla.
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